Y es que las probabilidades de que en Zaragoza sople el Cierzo son muy elevadas, en concreto este viento frío y seco que azota la capital del Ebro se deja sentir más de 300 días al año, por los que las probabilidades son elevadas, si a ello sumamos que en el mes de enero las temperaturas suelen ser gélidas, esto hará que seamos más conscientes de cuando el Cierzo está llamando a la puerta.
Sobre lo de rosconero, hablaremos entonces de la tradición de celebrar esta festividad teniendo por postre un roscón, generalmente de nata, el cual llevará un regalo oculto, aquel o aquella afortunado que lo descubra cargara con el honroso premio de pagar el del siguiente año.
Pero, ¿quién fue San Valero y por qué es patrón de Zaragoza? Fue obispo de Zaragoza hace muchísimos años, en concreto en el siglo IV, a su vez fue el predecesor de San Vicente, patrón de Huesca.
Su festividad se celebra cada 29 de enero, el cual es festivo local en Zaragoza. En la plaza del Pilar se realizan actos conmemorativos, entre ellos el reparto de un roscón gigante, en el que mayores y jóvenes hacen largas filas para poder coger una ración de ese tradicional postre.